Creo entender que los últimos comentarios que leo se están refiriendo a que el perfil social y económico de los nuevos socios bajó cuando se vendían acciones baratas porque se necesitaba dinero para sacar adelante y pagar el campo nuevo.
Esas consideraciones están fuera de lugar. De los que han “saqueado” el club no hay nadie nuevo ni de mal pedigrí, son las “familias” las que han desviado nuestro dinero. Solo hay que repasar los nombres de secretarios, consejeros, gerentes de los últimos 30 años.
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La corbata de marca, el pañuelo en la solapa, la altanería solo disfrazan a quienes se han servido del club y de las cuotas de los socios a los que se ha mantenido oculta tanto la realidad del club como sus manejos para que nadie notara como se vaciaba la caja.
Yo, que soy socio antiguo, puedo asegurar que las timbas, las peleas de socios, las partidas de póquer en el despacho de Silvela eran diarias. No importaba que algunos se arruinaran o que otros se jugaran el dinero de las nominas, el club respondía con el dinero de los socios sin apellido.
Pradas es uno de ellos, mismo método, mismo sistema, mismas corbatas y misma respetable apariencia. Eso sí, entre ellos se respetan mucho a pesar de conocerse a fondo. Hola Don chorizo. Como estas Don Mangante. Me alegro de verte pedazo de ladrón.
Veremos cuando se tengan que vender las acciones a bajo precio por las subidas y derramas cuanta gente de medio pelo y gitanos, alguno tenemos por el oro que le cuelga, podrán ser nuevos socios.